Fuerte alza de precios en alimentos
En los últimos 12 meses, los precios de los alimentos más básicos de la canasta familiar tuvieron un incremento que duplicó la suba promedio alcanzada por los salarios: mientras que los primeros avanzaron un 32,1% según una estimación privada, los segundos quedaron rezagados, con ajustes promedio del 17 por ciento. Esto significa que hubo una pérdida del poder de compra de los productos esenciales, cuyos valores se utilizan para determinar si los hogares, en función de cuántos ingresos perciben, caen o no en la indigencia.
De acuerdo con el relevamiento de precios realizado por la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), en febrero el valor de la canasta básica de alimentos aumentó un 7,2% con respecto a enero, lo que llevó a $ 920,40 el precio de los productos para una familia integrada por un matrimonio joven y dos hijos menores. Ese monto era de $ 858,40 en el primer mes del año, y de $ 696,8 en febrero de 2009, siempre según el centro de estudios privado: la diferencia interanual de los precios es del 32,1 por ciento.
FIEL valorizó también la canasta más amplia de bienes -cuyo valor determina el umbral de la pobreza- en $ 1788,50 para una familia como la descripta en el párrafo anterior. El aumento en este caso fue del 3,9% mensual y del 23,02 por ciento respecto de febrero de 2009.
Las estimaciones realizadas por FIEL -así como las de otros centros de análisis privados- presentan una brecha significativa con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), fuertemente cuestionados desde la intervención política de esa dependencia, decidida por el gobierno de Néstor Kirchner a principios de 2007, a raíz de la aceleración del índice de suba de precios que se buscaba disimular.
Según los informes oficiales, la canasta básica de alimentos para una familia tipo tenía un valor de $ 492,23 en enero último (el dato de febrero aún no fue difundido), en tanto que la canasta de pobreza oficial se ubicó en ese mes en los $ 1095,27. El valor de los alimentos es un 11% superior al informado doce meses antes, con lo que los datos relevados por FIEL prácticamente triplican esa tasa.
Los sueldos
Por otra parte, para el último período anual, diversas fuentes ubican el incremento de los salarios en alrededor de un 17 por ciento. Esa cifra surge, por ejemplo, del alza promedio otorgada en las negociaciones de convenio, y también del índice de salarios (incluyendo formales e informales y del sector público) elaborado por el Indec. Además, y si bien con datos al tercer trimestre de 2009, las declaraciones de las empresas al sistema jubilatorio indican que el alza promedio interanual fue del 18% para los sueldos en blanco, en tanto que la encuesta de hogares del Indec refleja un ajuste, para todos los trabajadores, del 15,7 por ciento.
La canasta básica de alimentos incluye productos en diversas cantidades, según el sexo y la persona para quien se estima su costo. Se incluyen, por ejemplo, pan, galletitas, fideos, carnes, huevos, frutas y hortalizas, aceites y bebidas. El trabajo de FIEL aclara que se consideran los mismos productos y cantidades que toma el Indec, aunque no por ello se avala que ésa sea la canasta correcta para la medición de la indigencia.
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